Elcorreo.com 23/02/2016 – 75 locales de Bilbao, Getxo, Barrika, Loiu, Sopela, Gorliz y Sestao invitan a hacer ‘vida normal’ a los dueños de mascotas.
En Euskadi, donde hay 320.000 perros censados según el Registro General de Identificación de Animales, más del 25% de los hogares comparten su vida con al menos un can. Es una cifra que crece a un ritmo de casi el 5% al año y cada vez más gente quiere disfrutar de los placeres de la vida en compañía de su amigo más fiel. En este sentido, varias localidades vizcaínas, con Bilbao a la cabeza, son cada vez más conscientes de las necesidades de las mascotas, y también de sus dueños. En la Vermutería Promenade de la calle Ledesma, en Bilbao, dan la bienvenida a los clientes con un vermut y a los perros con un bebedero lleno de agua fresca a la entrada. En la tienda de moda La Suite de la calle Doctor Achúcarro dejan que el can aguarde en el interior hasta que su dueña escoge las prendas que se quiere llevar. La propietaria del negocio, Ainhoa Artetxe, piensa que «los grandes almacenes podrían animarse» y seguir esta tendencia, porque «aquí, en mi tienda, los animales se quedan quietos y no molestan».
En el establecimiento de alquiler de bicicletas Tourné tienen ‘chuches’ y cestas específicas para los perros que acompañan a sus amos. En el Hotel Ercilla, opina su director, Iñaki Etxeguren, que «la gente que viaja con mascotas las tiene muy educadas, controladas y limpias». Revela que las habitaciones ocupadas por mascotas, a las que ofrecen camita, bebedero y galletitas, se limpian tras su uso «con productos antiparasitarios», para dejarlas impecables. En el salón de belleza Digitus de Getxo piensan que permitir a sus clientas traerse «su perrito» mientras se hacen la manicura es «un valor añadido» del negocio. Y en el restaurante italiano Don Peppone de Getxo admiten al mismo tiempo hasta cinco canes, incluso de los grandes, de 25 kilos de peso, y recuerdan que disponen de una terraza calefactada para quienes prefieren comer o cenar con mayor comodidad fuera del local.
«Los grandes almacenes deberían animarse. En la tienda el animal espera quieto y no molesta»
Así hasta 75 establecimientos de Bilbao, Getxo, Barrika, Loiu, Sopela, Gorliz, Sestao y Noja, en Cantabria, entre los que se cuentan hoteles, comercios, restaurantes, estudios de fotografía, tiendas de ropa, bares, cafeterías, atracciones… no ponen pega alguna a la hora de recibir a clientes con perro. Pero, ¿se puede hacer vida ‘normal’ en compañía de una mascota? En Dog Vivant (www.dogvivant.com) piensan que sí. Detrás de esta plataforma virtual recién creada en Bilbao «para facilitar los planes con perros a ciudadanos, visitantes y turistas» están Elena Fernández y Ana Fernández -comparten apellido, pero no parentesco-. Su labor ha empezado en Bizkaia, pero pronto estará en otras provincias. Lo que Elena y Ana han hecho es identificar los espacios que admiten perros y con qué condiciones -por tamaño del animal, a según qué horario, cantidad de perros al mismo tiempo…-. «Queremos que el usuario tenga toda la información posible antes de ir». La iniciativa cuenta con 400 usuarios registrados y el listado de negocios se actualiza cada día. «En estos momentos estamos en contacto con establecimientos de San Sebastián y con casas rurales de Asturias y Cantabria, adonde viajan muchos vizcaínos», advierten. Además, con los primeros 50 ‘anfitriones’, Dog Vivant ha editado una guía de bolsillo. Esta publicación perruna es gratuita y está disponible en las oficinas de Turismo de Bilbao y de Getxo, entre otros puntos de entrega. «¡Que no sea por planes con nuestro perrete!», apuntan.
La idea surgió de una necesidad. Elena vive con su perra, ‘Mina’, y cada vez que necesitaba información sobre admisión de animales en hoteles, tiendas y restaurantes se tiraba horas buscando en la red, sin encontrar ningún sitio que aglutinara toda esa información. Vio que lo más práctico era bajar al parque y compartir consejos y contactos con otros dueños de perros. Un buen día pensó que podía hacer más por ordenar todos estos datos y, tras dejar su empleo en una empresa de publicidad, tocó varias puertas y creó una web que, con dos meses de vida, es ya el referente más fiable en el País Vasco para saber adónde puedes ir con tu perro sin dar explicaciones ni que te las pidan. «Si asumes de forma natural que puedes salir a hacer unos recados y entrar en diversas tiendas con el perro, desaparecen muchas de las desventajas o de los problemas de tener mascota», considera Elena Fernández.
Arriba, Maider Sierra, que tiene un estudio de fotografía canina, alquila una bici en Tourné sin dejar en casa a sus dos perras. Abajo, en la Vermutería Promenade, le ofrecen agua fresca a la entrada y en La Suite, las clientas compran moda con su perro.Arriba, Maider Sierra, que tiene un estudio de fotografía canina, alquila una bici en Tourné sin dejar en casa a sus dos perras. Abajo, en la Vermutería Promenade, le ofrecen agua fresca a la entrada y en La Suite, las clientas compran moda con su perro.Arriba, Maider Sierra, que tiene un estudio de fotografía canina, alquila una bici en Tourné sin dejar en casa a sus dos perras. Abajo, en la Vermutería Promenade, le ofrecen agua fresca a la entrada y en La Suite, las clientas compran moda con su perro.
LOS NEGOCIOS DAN LA BIENVENIDA A LOS PERROS
Arriba, Maider Sierra, que tiene un estudio de fotografía canina, alquila una bici en Tourné sin dejar en casa a sus dos perras. Abajo, en la Vermutería Promenade, le ofrecen agua fresca a la entrada y en La Suite, las clientas compran moda con su perro. / LUIS ÁNGEL GÓMEZ
Una pegatina a la entrada
Elena y Ana han creado una pegatina que reparten entre los locales para que la peguen en la puerta o en el escaparate con el fin de hacer más directo el reconocimiento. Formar parte de esta comunidad tiene una cuota anual. Los comercios pagan 60 euros al año; las cafeterías y restaurantes, 72; y los hoteles, 180. Basada en la información recogida en la plataforma, los distritos de Bilbao La Vieja (zona del Muelle de Marzana) y Ensanche (Heros y alrededores) y, en especial, los «pequeños establecimientos de nueva creación regentados por gente joven» que pasan por alto el hecho culturalmente aceptado hasta la fecha de que los perros no pueden acceder a un local son los más ‘friendly’, uno de los sufijos en lengua inglesa que más se utilizan para inventar conceptos.
Dog Vivant tiene asimismo un carácter colaborativo. Los usuarios pueden aportar sus propias experiencias, positivas y negativas. Elena Fernández confiesa que no va con ‘Mina’ de rebajas, por ejemplo. «No todos los momentos son adecuados para acudir con tu mascota a un comercio». Apela al sentido común y a evitar el estrés y la incomodidad para el animal y para todos, sean negocios amables con los perros o no. «Hablamos desde la convivencia, y no desde la exigencia. Entendemos que hay gente a la que no le gustan los perros y creemos que hay sitios y formas para todo», argumenta.