Viendo la evolución que está teniendo el comercio local presionado por el comercio online, la agencia Brain up Grup acaba de lanzar la versión gratuita de buugit. La moneda virtual, en forma de app que quiere convertirse en una herramienta de atracción del consumidor online hacia el comercio físico y de proximidad.
Si al principio fueron un problema los centros comerciales luego fueron los comercios online y ahora por si no fuera poco la entrega a domicilio en 1h etc.
En 2017 habrá 1.000 millones de personas que comprarán a través de su Smartphone y actualmente el 80% de los usuarios se informa sobre productos y servicios usando su móvil
La magia recae en premiar a los usuarios acumulando Buugits de forma gratuita, por el mero hecho de disfrutar e interactuar con la aplicación, visualizando ofertas, compartiéndolas, valorándolas, etc.
Como apoyo al cliente, el programa dispone de un geolocalizador que informa de las tiendas más cercanas respecto a su ubicación y de sus ofertas. Una vez en el comercio, la transacción es sencilla. A través de un sistema de escáner y de lectura QR’s se realiza el canje automático de los ‘buugits’ entre usuarios y el negocio. ‘Existen muchos tipos de ofertas Por ejemplo, desde una zapatería que vende un par de zapatos por 30€ más 2.000 ‘buugits’ o un centro de estetica que ofrece una sesión de Chocolaterapia Facial por solo 300 buugits y 0€.’ Este proyecto, por tanto, ofrece al usuario una ‘manera diferente de obtener descuentos o promociones en los comercios.’
Para el establecimiento, es una fórmula alternativa de hacer publicidad. Además, para los comercios que se descarguen la aplicación hay algo que les puede gustar mucho. Tradicionalmente, cuesta mucho medir el retorno real de las inversiones en publicidad como en Opis, buzoneo o las típicas revistas de anuncios. “Buugit” ofrece un panel de control donde poder visualizar estadísticas y ver en tiempo real la repercusión de tu perfil y ofertas.
El usuario va acumulando “buugits” en su teléfono móvil a medida que interactúa con los comercios que participan en la plataforma y, luego, esa moneda virtual sirve para pagar en las tiendas a pie de calle. Además, los comercios participantes exhiben un distintivo en su escaparate. Con ello, se consigue un ‘tráfico directo hacia el comercio haciendo que los usuarios deban canjear sus “buugits” en persona.
La propuesta, que ha arrancado con fuerza en la ciudad Terrassa, combina el mundo virtual con el real. El dinero virtual es una fórmula válida para el comercio tradicional en su afán por reinventarse en su entorno cambiante.
Fuente: CIBilbao