El Ministerio antes capitaneado por Román Escolano pondrá ayudas públicas y planes formativos a disposición de las empresas para que aprendan a ‘digitalizarse’ frente a la amenaza número uno
El Gobierno echa un capote a los ‘retailers’ frente a Amazon. Patronales, expertos independientes, comunidades autónomas y directivos del anterior Ministerio de Economía, Industria y Competitividad han mantenido una primera reunión para crear un Observatorio de Comercio 4.0, un proyecto aún en pañales nacido para ayudar sobre todo a las pymes a ‘digitalizarse’. En él están presentes empresas de la talla de El Corte Inglés, Carrefour, Media Markt, Fnac o Cortefiel —representadas a través de ANGED y ACES, entre otras—, asociaciones de pequeños comerciantes, organizaciones de consumidores y académicos.
Al otro lado de la mesa se sientan los miembros de la secretaría de Estado de Comercio, antes dependiente del Ministerio de Economía pero ahora integrada en el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo tras la llegada de los socialistas al Gobierno. Según fuentes del sector, la iniciativa partió de ese departamento y ha tenido una acogida abrumadora entre las empresas, con ‘overbooking’ en un primer encuentro que sirvió para sentar las bases y definir los grupos de trabajo.
Su entonces presidente, Dimas Gimeno, fue el primero en proponer unaplataforma europea de venta por internet para poner coto a un gigante «del que solo podemos aprender». Lo dijo tras criticar la «fiscalidad absolutamente ventajosa» de Amazon, unas palabras que respaldó el propio Mariano Rajoy. El que fuera presidente del Gobierno aprovechó su ponencia para poner en valor el plan de apoyo al comercio minorista, en el que se enmarca el nuevo observatorio. Los ejes son tres (transformación digital, internacionalización y formación) y el objetivo es ayudar al comercio tradicional en el reto de incorporarse a los nuevos escenarios de compras.
La Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) ofrece su máxima colaboración y adelanta la implicación de nuevos ministerios, comunidades autónomas o incluso ayuntamientos en un futuro próximo. «La iniciativa no solo está enfocada a aumentar la competitividad de las pymes, sino de todo el sector en su conjunto», matizan fuentes de la patronal. Las pequeñas y medianas empresas están representadas a través de la Confederación Española de Comercio (CEC), los supermercados van de la mano de ACES y las compañías de e-commerce tienen voz gracias a la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital), entre otros.
Ayudas públicas a golpe de ‘clic’
Tras sondear el terreno y percatarse de que el interés desbordaba todas sus expectativas, la secretaría de Estado de Comercio ha empezado a perfilar los distintos grupos de trabajo. La tarea de uno de ellos es aglutinar todas las subvenciones públicas (a nivel estatal, autonómico y local) en una única plataforma para facilitar los trámites de solicitud. «El objetivo es que las pymes conozcan todas las ayudas disponibles» y puedan pedirlas de manera ágil, aclaran fuentes gubernamentales. Habrá que ver si el Ejecutivo habilita nuevos fondos públicos en pro de la digitalización.
Los que más lo necesitan son los pequeños comercios de proximidad, un formato «en peligro de extinción» que ya sufrió con la expansión de las grandes superficies o la liberalización de horarios comerciales y ahora se enfrenta al reto del e-commerce. Así lo considera la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), una asociación que ya se ha dirigido a la nueva ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, en busca de una «plan estratégico urgente» para salvar a las tiendas tradicionales.

Casi la mitad de los internautas realizó alguna compra por internet en el segundo semestre de 2017, como refleja el último Panel de Hogares elaborado por la CNMC. Nueve de cada diez consumidores recibieron un paquete asociado a esas compras y el 51% se dejó influir por el precio.
El Observatorio 4.0 también abordará los temas regulatorios que afectan a los ‘retailers’ y a menudo emanan de Bruselas, analizará con lupa toda la información estadística disponible y ofrecerá planes formativos a todas las empresas interesadas. Según las fuentes consultadas, el cambio de Gobierno no supone una amenaza para su continuidad. «Todos estamos de acuerdo en la necesidad de impulsar la transformación digital de las empresas. Trabajaremos en la misma dirección» con independencia del color político.
Fuente: El Confidencial