La fórmula de Bompard para sacar al gigante francés de la distribución Carrefour de la crisis más profunda en sus seis décadas de existencia parece que funciona. Las acciones de la compañía cotizan en máximos de un año revalorizándose un 37% en algo más de seis meses según van teniendo resultados positivos su plan quinquenal para combatir la amenaza de Amazon y la crisis del sector. El grupo mejoró el resultado operativo un 3,75% hasta los 802 millones de euro y ha prometido mayores ajustes para su plan elevándolos de 2.000 millones a 2.800 millones.
Las acciones de Carrefour suben hoy casi un 3% tocando máximos de un año y eso a pesar de que el grupo aumentó las pérdidas un 5,6% hasta los 561 millones y las ventas cayeron un 3,6% hasta los 76.200 millones de euros. Más allá de los grandes números, los inversores están bajando al detalle de las cifras para saber si el plan de Alexander Bompard, el consejero delegado de Carrefour, que llegó a mediados de 2017 para salvar a la compañía, está teniendo efectos.
El grupo de distribución más grande de Francia estaba sufriendo caída en picado de sus ventas, dos profit warning consecutivos y el mercado comenzaba a dar por muerto a Carrefour y absorbido por Amazon. Bompard elaboró un plan de transformación a cinco años para que la compañía no terminara en manos de la plaga del retail, un desplome de las ventas por el rechazo de los consumidores al hábito tradicional de ir al supermercado.
El ejecutivo, que había logrado salvar a Fnac y renovar a la compañía para que pudiera competir con Amazon en comercio electrónico, planteó elevar la facturación online hasta 5.000 millones de euros en 2022 y reducir un 10% la superficie de hipermercados y abrir pequeñas tiendas de proximidad. En 2018, se abrió 3.000 establecimientos más pequeños.
La directiva ha acelerado sus planes de ajustes para 2020 después del primer año de cambio estratégico elevando el ahorro de costes a 2.800 millones desde los 2.000 millones.
Los esfuerzos han comenzado a dar sus frutos tras varios ejercicios de caída las ventas comparable crecieron en 2018. En concreto, crecieron un 1,4% y el flujo de caja efectivo ascendió un 15% hasta los 1.088 millones.
El grupo sigue arrastrando problemas anteriores. Carrefour afloró cargas financieras de 262 millones de euros y provisiones de 300 millones para actualizar el valor razonable de negocios puestos en venta, como las 273 tiendas vendidas a Dia en España. Y en Francia el negocio sigue en descenso. La facturación cayó un 0,6% hasta los 35.615 millones y Brasil sigue siendo el mercado más fuerte.
Bompard ha prometido recuperar el liderazgo en Francia, que perdió en 2017 a manos de los supermercados E. Leclerc aumentando el reparto a domicilio y el envío expres. Además de poner el foco en productos propios y ecológicos. La estrategia pasa por recuperar en Francia el millón de clientes perdidos que han dejado de comprar en Carrefour el último año, gracias a Internet y a los productos frescos.
Fuente: El Economista