• Las ventas cayeron 0,4% en febrero y hasta un 1,1% a precios constantes

La ralentización del consumo pasa ya factura a las grandes superficies. De acuerdo con los datos del INE, encadenan ya tres meses de caída de las ventas. Su facturación se redujo un 1,4% en diciembre de 2018, un 0,6% en enero de este año y un 0,4% el pasado febrero. Pero es que si se mide a precios constantes, la situación en el segundo mes del año es aún peor, con un descenso de las ventas del 1,1%.

Ante todo ello, Anged, la patronal que agrupa a compañías como El Corte Inglés, Carrefour, Eroski, Alcampo, Ikea, Media Markt o Leroy Merlin, considera prioritario un plan de reformas que impulse su actividad. Antes de nada, se trata de eliminar las trabas administrativas y barreras de apertura que, en su opinión, «suponen las más de 300 normas de ámbito estatal, autonómico y local que soporta el sector».

Impulsar la competitividad

Pero, además, la asociación reclama también «un marco fiscal que impulse la competitividad de las empresas y no genera discriminación entre modelos de negocio, canales de venta y tipos de empresas», como ocurre ahora, según dice, con el Impuesto sobre Grandes Establecimientos Comerciales de algunas comunidades autónomas.

Otro gran reto es de la digitalización. Anged reclama «un impulso decidido a la libertad comercial, que ayude a las tiendas físicas a adaptar sus horarios de venta a la realidad del entorno de consumo actual», al margen de apostar también por la digitalización de las empresas, la formación y capacitación de nuevos perfiles profesionales. Anged recuerda que la Comisión Europea situó el año pasado a España como el segundo país de la UE con mayor número de restricciones al ejercicio del comercio. Barreras a la apertura de nuevas tiendas, limitaciones de horarios comerciales, impuestos específicos o las regulaciones de las rebajas son algunas de las prácticas que señala el Ejecutivo comunitario como principales causantes de esta situación, que están frenando al sector.

Pese a la caída de las ventas de las grandes superficies, la cifra de negocios global del comercio minorista subió el 1,7% en febrero respecto al mismo mes de 2018, con lo que este indicador se anotó su quinto mes consecutivo al alza, según los datos del INE. Corregidos los efectos del calendario, el crecimiento en febrero fue algo menor, del 1,2 pro ciento, tres décimas más en cualquier caso que en enero.

Especialmente complicada en la situación en la distribución textil. Las ventas en el mes de febrero se incrementaron un 2,8%, pero según la asociación Acotex, eso es debido a la bajísima base comparable del año pasado, cuando en el mismo mes las ventas cayeron un 1,90% y, sobre todo, «a que las tiendas tienen mucho producto que no han vendido en la campaña de Navidad, ni en las rebajas del mes de enero, por lo que se han visto obligadas a ofrecer mayores descuentos y dar salida al producto en stock».

Deterioro del textil

El textil encadena en el acumulado del año una caída del 0,8% y eso después de un descenso ya el año pasado del 2,2%. Acotex alerta, además, del «empeoramiento de los márgenes debido a campañas tremendamente agresivas de descuento a lo largo de todo el año», que están arrastrando a muchas empresas a una situación muy complicada. «Tenemos que ser conscientes de la insostenibilidad de este modelo de negocio», asegura la patronal del comercio textil.

Fuente: El Economista