Se pueden acoger a este servicio las personas con discapacidad reconocida con al menos el 33 por ciento de grado de discapacidad.
Un convenio, pionero a nivel nacional, que ya está dando sus frutos, tal y como ha podido comprobar el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, durante su visita al supermercado Supercor de Albacete, del grupo El Corte Inglés, que ha recibido por parte de la Consejería de Sanidad el distintivo que le acredita como centro adherido al convenio, un logo que expondrán a la entrada del establecimiento, según ha informado la Junta en nota de prensa.
El convenio de compra asistida destaca que el establecimiento albaceteño ha implementado un programa de servicio especializado de apoyo en la compra para personas consumidoras con discapacidad en su establecimiento, a través de dispositivos físicos que permiten adaptar el espacio a las necesidades de este perfil de consumidor y con el apoyo de personal cualificado que ejerce de apoyo en al usuario en la compra.
PERSONAS CON DISCAPACIDAD
Se pueden acoger a este servicio las personas con discapacidad reconocida con al menos el 33 por ciento de grado de discapacidad, que presentan limitaciones para poder realizar una compra en igualdad de condiciones que el resto de las personas independientemente de su discapacidad física (PMR), sensorial, intelectual o del desarrollo, además de personas con alguna enfermedad mental, mayores o que padezcan de enfermedad crónica, con limitaciones en la movilidad y de tipo cognitivo, que presenten también el grado de discapacidad antes referido.
Así, las empresas adheridas cuentan con personas dedicadas a esta tarea perfectamente identificadas a través de chalecos que llevarán el mensaje de «compra asistida».
El personal responsable de prestar el servicio de asistencia y apoyo a la compra puede responder a varios perfiles según criterio de cada una de las empresas adheridas, siendo personal propio de la empresa que reciba una formación ‘ad hoc’ para desempeñar las funciones de asistente en la compra asistida a personas con discapacidad, o bien a través de personal externo.
Siempre que resulte posible, se optará por la contratación de personas con discapacidad. Estas personas orientarán, informarán y facilitarán a los consumidores el proceso cotidiano de la compra en una apuesta decidida por la igualdad de derechos y oportunidades.
A través del convenio, la Junta de Castilla-La Mancha se compromete a impulsar la implementación de iniciativas y medidas propuestas en el desarrollo del programa, difundir y promover las iniciativas objeto del programa mediante los recursos propios de la organización y facilitar los distintivos o carteles de información que deben exhibir los establecimientos adheridos al programa, entre otras cuestiones.
Fuente: dclm.es