Ante los cambios de consumo y de relación social, anticípate para adaptarte al nuevo entorno
No todo en las crisis tiene que ser negativo. Un emprendedor optimista aprovecharía una situación como la que estamos viviendo ahora por el Covid-19 para darle una vuelta a su modelo de negocio. Lo lógico y racional es hacerlo cuando las cosas van bien, porque todo se mira con mayor entusiasmo, libertad y, sobre todo, sin prisas –que siempre son muy traicioneras–, pero como las cosas (casi) nunca salen como a uno le hubiera gustado, ahora no cabe otra opción que replantearse el modelo de negocio.
Como afirma Jordi Damià, CEO de Setesca y profesor de EADA Business School, “la crisis provocada por el coronavirus ha puesto y va a poner ‘patas arriba’ los modelos de negocio de gran parte de las empresas. Vendrán más días de confinamiento, puede volver un brote y los modelos de consumo y de relación social van a cambiar. La clave es anticiparse y poner en marcha una serie de estrategias para adaptarse al nuevo entorno”.
Y como esto va de anticiparse en la medida de lo posible y de lanzar nuevas estrategias, para combatir las consecuencias del coronavirus, Damià recomienda tener en cuenta los siguientes aspectos:
CAMBIO EN EL MODELO DE CONSUMO
“Las razones para pensar que la crisis vaya a alargarse son varias. Por un lado, se va a tardar en desarrollar una vacuna viable. Durante el tiempo de confinamiento y posterior a él, habrá miedo y el modelo de consumo de productos básicos y no básicos cambiará. Además, si hay suerte y se descubre una vacuna rápida, nada asegura que las sucesivas mutaciones del virus no creen epidemias periódicas. Todo esto se advierte desde el ámbito científico. En este punto, habrá que asumir un mundo en el que todos irán con mascarilla en los próximos meses, las reuniones multitudinarias estarán prohibidas o donde casi todo se consumirá a distancia”.
PROTECCIÓN DE LA TESORERÍA: REDUCCIÓN DE COSTES Y ACCIÓN COMERCIAL
“Una de las primeras claves para adaptarse al nuevo entorno a corto plazo es la protección de la tesorería. Esto pasa, por un lado, por la máxima reducción de costes. En este punto, no hay que caer en la tentación de dejar de pagar a terceros, puesto que esto generaría una pérdida de confianza. Y, por otro lado, por acelerar las acciones comerciales”.
REVISAR MODELO DE NEGOCIO Y CADENA DE VALOR
A corto plazo, “también se hace necesario revisar el modelo de negocio y la cadena de valor y esto pasa por asumir que hay que adaptarse al nuevo modelo de consumo de los clientes (en remoto, con mascarilla, rehuyendo la masificación, y con poco dinero). El quid de la cuestión es darle la vuelta al modo en el que está planteada la empresa, preguntarse qué producto se puede ofrecer con lo que se sabe hacer, por qué canales se puede vender y las herramientas para llevarlo a cabo”.
POTENCIACIÓN DEL CANAL ONLINE Y LA OPORTUNIDAD DEL COMERCIO DE PROXIMIDAD
“Las empresas tienen que ser conscientes que los canales tradicionales van a perder mucho volumen de negocio y que, por tanto, el canal online debe crecer para poder cubrirlo. En este sentido, será básico la implementación de medios de ecommerce, call center y, por lo tanto, todos los procesos de soporte necesarios como pago online, logística de última milla, teletrabajo efectivo, etc. En este punto, el comercio de proximidad tendrá que vender justo eso, proximidad. Por este motivo, no será de extrañar que se creen marketplaces locales subvencionados para ayudar al pequeño comercio a luchar contra las grandes plataformas de distribución”.
REFUERZO DE LA INFRAESTRUCTURA INFORMÁTICA
“El soporte y el refuerzo de toda la infraestructura informática va a ser ser básico en un entorno no solamente de ecommerce sino también de pagos online, de CRM efectivo, de segmentación de clientes, de reducción de costes, de teletrabajo, de virtualización de soluciones, etc.”.
ADECUAR SU OFERTA AL NUEVO MODELO DE CONSUMO
“Uno de los grandes retos de las empresas debe ser también adecuar su oferta a este modelo de consumo. Se hace difícil a corto plazo imaginarse a 100.000 personas en un campo de fútbol, a 40 personas en una sala cerrada de un gimnasio o a 200 en una sala de cine, por lo que este tipo de empresas deben efectuar el cambio inmediatamente”.
Fuente: emprendedores