Por Anwar Zibaoui, coordinador general en ASCAME
La COVID-19 ha supuesto un duro examen para las ciudades, ya que éstas han tenido que valorar su capacidad para abordar la propagación de la infección. Es decir, comprobar si el entorno urbano era resistente, si funcionaban los instrumentos de apoyo, si la gestión de riesgos era eficaz y eficiente, o si un enfoque diferente y más sostenible nos habría ayudado a manejar mejor l …
Leer noticia completa: Europa Press