Un dispositivo electrónico recaba datos sobre los gustos del cliente para que los establecimientos apliquen mejoras
Conocer el gusto y las preferencias de los consumidores para mejorar la experiencia de venta de los pequeños comercios de la ciudad es el principal objetivo del proyecto ‘I+D Comercio Minorista. Variables e indicadores’, un trabajo que la Facultad de Comercio de la Universidad de Valladolid ha puesto en marcha recientemente en Palencia dentro de la Cátedra de Innovación para el Comercio, en colaboración con consultora Sociograph. El proyecto, que acaba de finalizar su primera fase, consiste en el diseño de una plataforma de experiencia con clientes aglutinando datos de diferentes fuentes comerciales como son el número de personas que transitan por la calle, cuántas de estas entran en los establecimientos y cuantas compran para poder aportar las estrategias adecuadas a los pequeños comercios minoristas.
Ahora mismo, esta plataforma se encuentra en una fase piloto y se ha desarrollado durante dos meses de forma íntegra en Palencia y, de forma concreta, en la principal arteria comercial de la ciudad, la Calle Mayor.
Nueve son los pequeños comercios de proximidad que han participado en ‘I+D Comercio Minorista. Variables e indicadores’. Hasta el momento, se trata de pequeños negocios, pero no se descarta que, en un futuro, se puedan incluir otro tipo de tiendas, como grandes cadenas o franquicias.
Palencia ha sido la primera ciudad en poner en marcha este proyecto, pero ya está pensado que se haga extensivo a otras ciudades de Castilla y León en los próximos meses, antes de lanzarlo también a nivel nacional.
Una herramienta con muchas posibilidades de futuro
A partir de ahora, todos los comercios de la ciudad que estén interesados en este proyecto pueden formar parte de él y beneficiarse de toda la información conseguida para poder mejorar sus ventas. «Es algo a lo que vemos muchas posibilidades de aquí al futuro», explica Elena Martín Guerra, directora de Sociograph.
Este trabajo ha nacido en Palencia, pero pretende poderse extender y aplicar a cualquier otra ciudad de España para poder acercar de esta forma las tecnologías más innovadoras y potenciar la digitalización y el desarrollo tecnológico de un sector muy golpeado por la pandemia.
Elena Martín Guerra, directora de Sociograph, explica que desde la Cátedra se eligió a Palencia como escenario ya que presentaba todas las características que se necesitan para un proyecto como este. Además, destaca el interés del Ayuntamiento y las facilidades que ha dado en todo momento. «Se juntaron todos los condicionantes y es lo que ha permitido poderlo hacer así», agrega.
Esta primera fase se ha dividido en dos partes. La primera ha consistido en dotar a los comerciantes de un dispositivo electrónico en el que poder registrar diferente información de sus clientes y sus ventas como, por ejemplo, el sexo, la edad, la procedencia, de qué forma habían acudido al comercio, cuántos artículos se llevaban o el precio medio de estos.
Además de conocer más a los propios consumidores, la otra parte del proyecto consistía en realizar un análisis de los interiores de los comercios o el diferente atractivo de los escaparates bajo el nombre de ‘Visual Merchandising’, analizando qué zonas de los establecimientos son más atractivas y cuáles menos.
Aunque ya se ha recabado una importante parte de la información, así como una gran cantidad de datos, todavía quedan parámetros por incluir de cara al futuro, como el impacto del comercio ‘on-line’, la proximidad entre Palencia y Valladolid o el envejecimiento de los comerciantes.
Una buena oportunidad
Los primeros datos arrojados han permitido conocer a los responsables de los distintos negocios mucho más sobre los clientes que compran en sus establecimientos, así como también poner en marcha diferentes cambios que puedan mejorar el número de sus ventas y la calidad de estas en un futuro.
La posibilidad de poder participar en este programa ha sido recibida por los comercios de la capital palentina como una gran oportunidad de poder ver aumentadas sus ventas y también de potenciar la calidad de cada una de ellas, centrándose en poder ofrecer la mejor de las experiencias a sus clientes. Es el caso del comercio textil Gabán, que no ha dudado en volver a trabajar de la mano de la Cátedra de Innovación para el Comercio. En su caso, es la segunda vez que colaboran de forma conjunta. Para Iván González, responsable de la tienda, ha sido una experiencia muy enriquecedora para su negocio. «Ha sido una gran herramienta para ver dónde podemos mejorar analizando datos que, por nosotros mismo no podríamos haber adquirido», explica Iván González. En su caso, explica, han tratado de poder adaptar todas las observaciones derivadas de este proyecto en mejorar su local.

Una mujer pasa delante de un escaparate con cartelería de rebajas. / M. BRÁGIMO
En su caso, después de haber recibido alguno de los resultados, han decidido potenciar la cartelería y la imagen del comercio, dotándolo de nuevos colores más llamativos. Desde hace unas semanas están comenzado a implantar estas mejoras de forma paulatina en diferentes espacios del local.
Deportes Artiza ha sido otro de los participantes y sus trabajadores consideran muy beneficioso poder colaborar en todo lo que pueda suponer una mejora para su negocio. Después de recibir los primeros datos, Margot Reguero explica que han podido ya sacar las primeras conclusiones y, en cuanto acabe el periodo de rebajas, se pondrán en marcha algunos cambios. Por ejemplo, poder dotar de mayor visibilidad a alguna de las zonas consideradas como frías para hacerlas más atractivas y visibles al cliente según entra en el comercio.
«Estamos muy contentos tanto con el proyecto como con la respuesta de nuestros clientes y también con las respuestas que estos han dado», agrega. Tris es otro de los comercios que no ha dudado en volver a colaborar con esta cátedra de la Uva y aplicar los cambios y mejoras necesarios para potenciar las ventas. «Me ha gustado mucho porque también conoces más a tus clientes, de dónde vienen, qué buscan o qué se acaban llevando», indica su responsable, Rosa de Brito.
Fuente: elnortedecastilla